El Disco Abrasivo con Soporte de Papel 3M® Hookit™ 216U está hecho de óxido de aluminio sobre un refuerzo de papel liviano y es adecuado para aplicaciones de acabado con una lijadora roto orbital sobre madera, pero también sobre imprimador, pintura, selladores, esmaltes, fibra de vidrio y plásticos. La construcción de capa abierta y un revestimiento resistente a la carga ayudan a evitar la acumulación de residuos en el disco para optimizar el corte y prolongar la vida útil del disco.
Nuestro sistema de unión Hookit™ 3M® (gancho y lazo) hace que el disco se pueda cambiar de manera rápida y sencilla, lo cual significa que se puede utilizar una y otra vez durante toda la vida útil del abrasivo. Para extraer el polvo, utilice nuestro disco con una almohadilla de refuerzo libre de polvo Hookit™ limpio y una lijadora rotorbital con aspiradora (ambas se venden por separado). Los discos de papel de lija cortan mejor y duran más cuando no se acumula polvo en la superficie de corte de los abrasivos. El sistema de manejo del polvo de 5 orificios utiliza una serie de agujeros simétricamente espaciados en el abrasivo que están alienados a los de la almohadilla del disco. La succión mediante un sistema de vacío atraviesa los orificios para recolectar el polvo del aire y de la pieza y mejorar tanto las condiciones de trabajo como el rendimiento del disco. La estructura de granulado poco denso hace que quede un espacio entre los granos del abrasivo que ayuda a evacuar el polvo y a evitar que este se acumule en el borde cortante de los granos. El revestimiento resistente a cargas también permite que el disco siga cortando inclusive al lijar maderas blandas, pinturas y otros materiales que, de otro modo, obstruirían el disco y dificultarían la capacidad de lijado. Todo esto se traduce en el aumento de la productividad y la disminución del consumo de materiales. Elegimos el abrasivo de óxido de aluminio, que es una opción popular entre los profesionales industriales, debido a su índice de cortes rápidos y una vida útil prolongada. Este mineral es un abrasivo fuerte y duradero que se autofractura para exponer bordes cortantes nuevos. El óxido de aluminio es adecuado para una amplia variedad de materiales en carpintería y trabajos en metal, incluidas las aleaciones ferrosas.